Resulta curioso que una saga tan ligada a Sega como Cotton tuviese una entrega para Super Nintendo, pero así fue. Y, si os digo la verdad, me gusta casi más esta versión que la original, Fantastic Night Dreams Cotton para la placa arcade Sega System 16, de la que hablaré en mi próximo artículo sobre esta peculiar franquicia.

 

Su título completo es Märchen Adventure Cotton 100%. Fue desarrollado por Success y editado y distribuido por Datam Polystar, otra de esas compañías japonesas más conocidas… en Japón y en ningún otro sitio más. Personalmente, no tengo del todo claro si Cotton 100% es una secuela del original, Fantastic Night Dreams Cotton, o una suerte de remake, pero, teniendo en cuenta que más tarde apareció Cotton 2 para Sega Saturn y Sega Titan Video, creo que esta entrega para Super Famicom es más bien lo segundo: una revisión de la recreativa original.

 


-Jo, Silk, qué resacón tenía aquí, ¿te acuerdas?
-¿Ves? Si es que no se te puede llevar de juerga a Hogsmeade.

Y os preguntaréis: «¿y este tío por qué demonios no empieza por el primer juego de la saga? ¿Por qué empieza con Panorama Cotton y sigue con este?» Pues bien: primero, porque eso de empezar la casa por los cimientos ya está muy visto y me encanta tocar los cojones; segundo, porque Panorama Cotton me parece el mejor juego de toda la serie, y tercero, porque Cotton 100% fue el que me hizo descubrir a nuestra bruja pelirroja favorita. Sí, me refiero a Cotton, no a Ginny Weasley, graciosillos.

 


-Aquí huele a Gradius.
-Pues yo no he sido.

Ocurrió hace ya algunos años. Yo, en la era de los 16 bits, tuve una Mega Drive, mientras que la mayor parte de mis amigos se hicieron con una Super Nintendo. Puede que sea precisamente por esto por lo que, el día que conseguí un CD lleno hasta arriba de ROMs de Super NES y unos cuantos emuladores de dicha consola, estaba más contento que unas castañuelas. De entre toda la larga lista de juegos que había en ese CD, había un título que me llamó mucho la atención: Cotton 100%. ¿Qué era eso? ¿Un simulador de fábrica textil? ¿Un juego basado en el famoso chiste de Jaimito? ¿Qué clase de título era ese para un videojuego? Uno bastante estúpido, sin duda, pero… er… ¡Un momento! ¿Quiénes sois vosotras? ¿Pero qué coño…?

 

¡No! ¡No, con la escoba NO!

 

¡Agh!

 

¡Ugh!

¡Wagh!

¡Ay!

– De verdad, qué individuo más cargante.

– Y que lo digas. Sus artículos son insufribles, de verdad.

– ¿Y ahora qué, Cotton?

– Pues… ¡Yo hablaré de nosotras!

– Bueno, realmente…


-Vaya, Silk, es la primera vez que no me robas vilmente el protagonismo en la pantalla de puntuación.

– ¡Déjamelo a mí, Silk! Er… ¡Ejem… ! ¡Hola, amigos, soy Cotton! Quizá me conozcáis de otros videojuegos como.. bueno, todos esos que ha mencionado el panoli este para hacerse el experto. El caso es que queríamos evitar que los lectores de Retrobits tuvieran que sufrir otra vez la falta de inspiración de este gilipollas y…

– Como el artículo de River Raid, ¿te acuerdas? No había quien lo leyese, además…

– ¡No me interrumpas, Silk! ¿Acaso quieres que te encierre en una botella, como hace el elfo cabezón ese?

– (Mira quién fue a hablar de cabezones)

– ¡¿Qué farfullas, bichejo?!

– Nada… Continúa.


-Uf, qué horror, aquella calabaza, ¿te acuerdas?
-Las siguen cultivando, al lado de esa central nuclear…

– Pues eso, que yo, la poderosa y bellísima bruja justiciera Cotton, os contaré nuestra historia. Todo empezó un día que…

– ¡Mira, Cotton! ¡Este individuo grabó en vídeo nuestra incursión en aquel bosque!

– ¡Que no me interrump…! ¿Cómo?

– ¿Lo ves? Es esta cinta en la que pone «Cotton 100% – Stage 4». ¿La ponemos?

– Bueno, seguramente ya la haya borrado grabando una porno encima, pero bueno, vamos a ver qué hay.

– Oye, Cotton, tampoco está tan mal.

– Mmmm… No sé… ¿A qué viene esa música? ¿Por qué no dejó el sonido directo?

– A lo mejor es porque se oían los improperios que gritas cuando estamos en plena batalla.

– ¡Por lo menos no chillo ni lloriqueo como tú, blandengue! Además, bien guapa que salgo.

– (Sí, apenas se nota lo marimacho que eres)

– ¿Qué farfullas otra vez?

– Er… Que salimos muy guapas, sí. Sigue contando, por favor.

 


-Oh, cuánta belleza en un menú de opciones, ¿verdad, Silk?
-Er… bueno… sí, supongo.

– ¡Ah, sí! Bueno, pues resulta que un día volvía a casa tras mi entrenamiento de vuelo con escoba, cuando oí una vocecita que me pedía ayuda para salvar su mundo. Al principio pensaba que me había vuelto majara y que oía voces en mi cabeza, como el pobre tío Angus, ¿te acuerdas, Silk?

– Sí, pobre hombre… se suicidó escuchando el último disco de Evanescence hasta la muerte. Fue horrible.

– Bueno, el caso es que era la voz de una mosca molesta.

– Era Su Alteza Real la princesa Peggie Sue, una noble y digna hada, como yo.

– Bueno, el caso es que era la voz de una noble y digna mosca molesta como esta, pero rubia y vestida como una muñeca antigua. Decía que debía ayudarles a ella y a los de su calaña a recuperar el poder de un arbusto capaz de dar caramelos como frutos, además de ser capaz de controlar el curso del día y la noche y las estaciones, hacer que los concejales de urbanismo sean gente honrada, quitar la celulitis… Yo al principio pensaba que a aquel insecto vestido de muñeca repollo se le había ido la mano con el firewhisky…

– Al principio no pensaste nada, Cotton; en cuanto mencioné lo de los caramelos, aceptaste inmediatamente.

– ¿Me quieres dejar hablar, pesada? Como decía, yo, la bella y heroica hechicera Cotton, acepté ayudar a las criaturas de los bosques de forma totalmente altruista y desinteresada.

– Sí, bueno, sólo nos pediste el Gran Caramelo.

– ¿Y acaso te parece mucho?

 


-Oh, aquel árbol malvado quería hacer una escena de tentacle rape conmigo, ¿te acuerdas?
-(Qué más hubieras querido tú, guapa)

– Teniendo en cuenta que brota una vez cada doscientos veinte años de un arbusto que mi pueblo ha custodiado durante generaciones en lo más profundo del bosque, y que es capaz de…

– Vale, sí, corta el rollo. Menuda mierda que me disteis. ¿A eso lo llamáis Gran Caramelo?

– Para nosotras es enorme.

– Medís quince centímetros; para vosotras, una PSP es un equipo de cine en casa. Me jugué el pellejo y combatí en solitario contra las horrendas huestes demoníacas por un caramelo del tamaño de una cabeza de alfiler.

– ¿En solitario? Mis compañeras y yo te ayudamos en la batalla en todo momento.

– ¿Qué menos, teniendo en cuenta que yo las rescaté de aquellos abejorros ridículos? Mira que dejarse capturar por semejantes bichos… Ni como damiselas en apuros me valéis. Además, ¿quién decidía vuestra formación de ataque en el fragor de la batalla? ¡Yo, bichejos sin iniciativa! Que tenía una que estar en todo.

– Bueno, Cotton, no dramatices, que en peores nos hemos visto. Aquellas «huestes demoníacas», como tu las llamas, tampoco eran para tanto. Lo único que nos costó un poco de trabajo fue derrotar a la diablesa que codiciaba el poder del…

– Oh, sí, lo recuerdo. Los nubarrones, el sonido de los truenos. Cegadores relámpagos fustigando el oscuro atardecer de aquella batalla final; el viento helado y húmedo en mi cara mientras, a horcajadas sobre mi escoba, respiraba un presagio de muerte con olor a ozono y a tierra mojada. ¡Oh, qué inefable sensación! Yo, frente a frente con la señora demoníaca, con mi magia y mi escoba como finísima, frágil, evanescente frontera entre la vida y la muerte! Qué lástima que el dolor en salva sea la parte me impidiera disfrutar de aquel glorioso momento en toda su intensidad. ¿Sabes cuánto tiempo estuve sin poder sentarme después de aquello?

 


-Huy, mira, una foto de aquel muñeco de nieve ruso…
-Era de Uzbekistán, creo.

– La verdad es que fue toda una aventura, ¿no crees, Cotton?

– Sí, como experiencia estuvo bien: visitamos lugares pintorescos, conocimos bichos interesantes, los masacramos… Oh, qué recuerdos…

– Estuvo muy bien…

– Sí, estuvo muy bien hasta el final, so rácanas. Cada vez que lo pienso… El Gran Caramelo… ¡Hay que joderse!

– Bueno, lectores de Retrobits, más o menos fue eso. Podríamos contar más cosas, pero tampoco queremos aburriros, como suele hacer el… huuuy… el tío este al que hemos dado una paliza y se está despertando.

– ¿Cómo, qué? ¡Larguémonos de aquí antes de que vuelva en sí, Silk! ¡Y recoge la cinta de vídeo, que el muy idiota es capaz de borrarla con porno!

 

Por Daniel

7 comentarios en «Cotton 100% – No usar lejía»
  1. «Cotton: Fantastic Night Dreams» fue estrenado como un juego para Arcade en el Sega System16B en el 91, y en el 93 fue transformando para Pc Engine/TurboGrafx-16 como un super CD-ROOM y tambien para el computador Sharp X68000 en el mismo año..
    el Playstation tambien tubo su version en el 99 que incluia lo mejor de las 2 versiones pasadas…

    LISTA:
    «Cotton: Fantastic Night Dreams» para en Sega System16B en el 1991
    «Marchen Adventure Cotton 100%» en el Super Farmicon en los principios del 94
    Panorama Cotton en el Sega Mega Drive a finales del 94
    «Cotton 2» fue echo para Arcade en el Sega ST-V y despues para el Sega Saturn, en el 97.(que por cierto Cotton 2 introduce al personaje Appli)
    «Cotton Bomerang» tambien salio en el ST-V y tambien paso al Sega Saturn, en el 98
    «Rainbow Cotton» (2000 JP) para el DREAMCAST en 3-D..
    «Magical Pachinko» Cotton para la PS2 (2003), que realmente no sigue lo que es COTTON pero tiene a sus personajes..

  2. Tu primer párrafo se adelanta a mi próximo artículo sobre la serie Cotton, pero gracias. Y el primer Cotton también tuvo una versión para Neo Geo Pocket. La versión de PC Engine no la probé, pero sí la de X68000. Por la de PlayStation, créeme que mataría.

    Respecto al segundo párrafo, sí, tengo clara la secuencia cronológica de la saga, por eso precisamente he querido saltármela. «Rainbow Cotton» ha sido una de mis últimas adquisiciones en cuanto a juegos de consola, por cierto.

  3. No te preocupes, hombre. Lo de que «no lo tengo claro» si es un remake o una secuela, se debe a que Cotton 100% apareció mucho después que el original, y a que la historia, aunque parecida, es ligeramente otra, por así decirlo. También algunos niveles son distintos, pero los hay que son casi idénticos en un juego y en otro: el nivel 4 de la versión de SNES (el que puedes ver en el primer vídeo) es una versión revisada del nivel 2 ó 3 (ahora mismo no lo recuerdo, hace mucho que no juego) de Fantastic Night Dreams Cotton, sólo que el mid-boss, el árbol, tiene un patrón de ataque distinto pero el mismo aspecto (prácticamente) y el jefe final, la muñeca, tiene un aspecto diferente (en la recreativa es el Segador Siniestro), pero un patrón de ataque muy parecido. Vamos, que Cotton 100% podría haber pasado por una secuela, pero si uno se fija bien se da cuenta de que es más probable que sea un remake.

    Respecto a los otros juegos de la saga, tengo muchísimas ganas de empezar a escribir sobre Cotton 2 / Boomerang, que son dos juegos magníficos (lástima que la emulación de ST-V en MAME no sea demasiado buena). También tengo ahora sobre mi mesa un ejemplar original de Rainbow Cotton, pero, como no tengo la Dreamcast aquí ahora, no puedo jugar :__(

  4. I’m so glad I got the joke on the evil tree boss XD
    Also, did anyone notice that if you hit enough times the snowman boss, he turns yellow?

    …Yellow snow…

    Okay, too much information.

    Whatever, thanks for reviewing this great (though hard as hell) game! ^^

  5. Joderrrrrr… devuelveme las retinas, maldito! xD A ese video de ocho minutazos le pegaria más algo como la BSO de Top Gun… xD Aquí huele a Gradius dice… que salao jajajaj

    PD: NEVER EAT YELLOW SNOW!!!!!!!

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